lunes, agosto 29, 2005

Reforma Intima, Conversion........

Sed perfectos. Corregir nuestro rumbo es nuestra gran mision personal. El Espiritismo se refiere a ella como la Reforma Intima, otras religiones le llaman Conversion, el gran converso de la historia, Saulo de Tarso, el Apostol Pablo. Tantos espiritus se esconden detras de viejas culpas y acciones que torturan su conciencia. La imposibilidad de brindarse el auto-perdon les encadena a largos procesos de sufrimiento. La capacidad de aceptar los errores, los crimenes cometidos y disponerse a la debida reparación, es el camino seguro para la restitución de la paz en nuestra conciencia y las bases de una vida futura mas feliz.
Aquellos seres que a nuestro alrededor han logrado esa conversion, esa reforma, merecen nuestro respeto. Si ademas han emprendido la obra de la divulgación del Evangelio aun mas deben ser admirados por su valentia. El siguiente relato fue basado en una historia verdadera. El final aunque feliz como en la mayoria de las historias, no logra expresar la realidad de esfuerzo y voluntad que se requiere para continuar una vida siguiendo a Jesus como Maestro, con felicidad y amor. Espero que este relato sincero pueda llegar hasta su corazon, y le advierta sobre los peligros de las drogas y la desestabilidad familiar. L.S.
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Yo estoy bien, ¿y tu?

"Mi nombre es Rafael Marcano Lopez, tambien conocido como "el centella". Viví mis primeros años en compañia de una señora que recibia dinero por cuidarme, ya que mi madre me abandonó a los dos meses de edad. Luego me cuidó mi abuela, hasta los tres años. Pude recuperar la fuerza de mis piernas, ya que padecia de Gastroenteritis que me inutilizó las piernas por largo tiempo.
Luego pasé a vivir con mi papá, quien estaba casado de nuevo. Viví con ellos hasta los catorce años de edad. Todos estos años tuve serios problemas emocionales, debido al mal trato de mi madrastra. Me sentí decepcionado y alejado de mi propia casa, igual me sentí despues en la escuela, porque mi papá me habia inscrito en un colegio para niños de una clase superior a la mia, lo cual provocaba en mi sentimientos de inferioridad y a la vez despertó el deseo de engañarme a mi mismo y a los demas frente a una realidad muy diferente.
Siempre me sentí solo, hasta en los momentos de mayor alegria yo estaba solo, nunca recibí un regalo de navidad, ni en mi cumpleaños, si los recibia era en fechas distintas.
A los ocho años use por primera vez el cigarrillo y alcohol, en pequeñas reuniones de pandillas. Asi comenzó mi vida en el vicio.
Debido a mi mal comportamiento, mi padre ne envio a casa de mi tia, que tenia una farmacia. Alli hacuia labores de limpieza y comenzó mi coocimiento con los nombres, tipos y usos de las diferentes drogas psicofarmacos. Comencé a usarlas.
Mientras entraba a los años de la juventud, mi vida cambiaba más drasticamente. Robaba carros para poder aparentar mi clase social. Esto causo que siempre me encontrara con gentes distintas y ricas y esto me estimulaba a seguir robando. Abandone mis estudios a causa de esta vida engañosa. Entre los catorce y dieciseis años cai preso en varias oportunidades, pero gracias a mi padre salia en libertad, prometiendo cambiar, pero no, reincidia en hurtos.
Cai detenido en un reten de donde me escape a los dos meses, me reuni con bandas hippies, con la satisfaccion de que todos teniamos un problema en comun: las drogas.
Solo, deprimido, perseguido y hundido, me enliste en el ejercito. Esto no me alejo de las drogas. En una de mis salidas conocí a una muchacha llamada Silvia, a quien engañe y seduje, para despues abandonarla embarazada.
Al terminar el Servicio Militar, a los diecinueve años de edad, intenté buscar trabajo con la esperanza de alejarme de mi vida pasada, no tuve suerte, de nuevo solo, desempleado y confundido, volví a mis andadas de antes. Me relacioné con personas de todo tipo, brujos, criminales, traficantes, drogadictos, rateros, ladrones, que provocaban en mi una gran confusión para diferenciar lo bueno y lo malo.

Una tarde, encontrandome drogado con hongos, sentí una fuerza sobrenatural que me hizo verme de pronto tumbado en el suelo. Reconocí de inmediato que era un mensaje de Dios. Graitando y deseperado comence a buscar ayuda, pero todo fue inutil. Pero de repente llegó a mi vida un mensaje esperanzador. Esta vez fue un Pastor que al darse cuenta de mi situación me identifico con un caso similar al de Nicky Cruz, un joven pandillero de Puerto Rico, el cual fue transformado por el poder de Dios.
Busque nuevamente a Silvia, y la encontre con una bella niña llamada Sonia, mi hija, a quien reconocí posteriormente. Milagrosamente llegué a una Casa llamada "Hogar Vida Nueva" (un centro de rehabilitacion para jovenes).
Alli pude detener mi carrera y permitir que mi mente y corazon se aquietaran lo suficiente para oir la Palabra de Dios y entender como podia conocer y recibir a Jesus en mi vida. Alli vivia bajo la ayuda de personas dedicadas al servicio del Señor y alli recibí a Cristo, y se opero en mi un cambio de vida. Realmente fui cambiado a una Vida Nueva. Me casé con Silvia y hemos dedicado nuestras vidas a la felicidad y el amor."

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Con respeto, en honor de nuestro amigo, Luis Alberto Aldana, Director Ejecutivo, Semanario "La EntreVista" e incansable luchador social. Q.E.P.D. 07-2004